28/2/11

Escenas de hotel con vistas a Gran vía.

Bebíamos entre las sombras,
él corría por la sala,
 y comenzaste a gritar un poema.
“¡ Arden oh tus ojos!.
¡Tú,
un canto a la muerte, qué ofensa !”

Versos vomitados.
Sin rima,
sin nada.

Dejas de gritar.

Te tocas los senos.
“¡JÁ!”

Él corría por la sala.
Ya no.
Ha muerto.
“¡ Arrivederci, au revoir, good bye, adiós mi amigo !

Celebras su derrota,
su muerte.
Lloras de la alegría.

Me miras.
Sonrío.
Sigo bebiendo.

El corría por la sala.
Nunca más.
Tú tampoco.
Muerta.

Te miro.
Sonríes.
Dejo de beber.

“¡ Auf wiedersehen ! ”

21/2/11

Cartas desde Israel.

Pastillas, pastillas
y más pastilla.
Jodidos medicamentos:
“éste para la cabeza,
éste para el corazón
éste para el intestino y
éste para todo”.
Ciudadanos enfermos,
putrefactos. Todo es un
engaño.
Propaganda.

¿Dónde venden la pastilla
de la madurez?
¿Y la de la añorada política?
¿Y la de la democracia?
Hace años que son requeridas.
Países enfermos,
putrefactos.
Ignoremos.

Muertos.
Revoluciones.

Admiremos.

15/2/11

Improvisación al limite.

Tú lo llamas rutina; yo lo llamo sobrevivir, sobrevivir 24 horas más.
Cicatrices de dolor en tu mirada.
¿Sabes? Vete a la mierda.

14/2/11

Sexo, copula, uno.

Un momento, uno,
en el que tu tocas el cielo,
en el que yo me siento
vivo, ardiendo.

Y nos fusionamos,
una persona, una.

La metamorfosis del dolor
en placer, del cariño
en amor, tú y yo,
todo en uno, en el orgasmo,
el culmen de la excitación,
lo sublime.
Catarsis emocional.

Relajación.
Uno.

3/2/11